En un entorno donde los datos se han convertido en el principal activo y la agilidad en el mayor diferenciador, las instituciones financieras están enfrentando una disyuntiva: adaptarse o quedar rezagadas.

Los sistemas que antes se consideraban robustos, hoy enfrentan la necesidad de ser no solo más eficientes, sino también más flexibles y personalizados para responder a un mundo hiperconectado, donde las expectativas de los usuarios evolucionan tan rápido como las herramientas que los bancos deben implementar.

Atentas a este nuevo paradigma, las instituciones financieras ya se han dado cuenta de que el único camino posible es la modernización: de acuerdo con un reciente estudio realizado por la consultora IDC, un 98% de las entidades bancarias planea llevar a cabo un proceso de transformación digital en los próximos tres años.

El informe también revela la importancia que tiene la nube para las instituciones financieras: el 53% de los bancos a nivel global señalaron que implementarán más del 40% de sus cargas de trabajo en entornos cloud.

En este escenario de transformación acelerada, las tecnologías emergentes se han convertido en los pilares fundamentales sobre los que se construye el nuevo paradigma financiero.

La IA, motor del cambio

La inteligencia artificial (IA) ha emergido como un pilar esencial en la modernización de las instituciones financieras, transformando procesos clave que van desde la atención al cliente hasta la gestión de riesgos.

Su utilización está creciendo de manera exponencial: según el pronóstico de Juniper Research, el gasto en inteligencia artificial generativa en el sector financiero aumentará más de 1.400% hasta 2030, alcanzando los 85.000 millones de dólares.

¿A qué se atribuye este incremento tan impactante? A que los bancos han advertido que adoptar estrategias centradas en IA es la clave para lograr modelos de negocios exitosos, en un mercado cada vez más dinámico y exigente.

La capacidad de la IA para analizar enormes volúmenes de datos en tiempo real permite a las entidades detectar patrones de comportamiento, lo que es crucial para prevenir fraudes y mejorar la seguridad.

Un ejemplo claro es el uso de IA en sistemas de detección de transacciones sospechosas, donde algoritmos avanzados pueden identificar movimientos anómalos que pasarían desapercibidos para los sistemas tradicionales.

Además, los asistentes virtuales impulsados por IA, como los chatbots, han mejorado drásticamente la experiencia del cliente, ofreciendo atención 24/7 y resolviendo consultas de manera instantánea.

En la banca personalizada, permite a las instituciones ofrecer productos financieros adaptados a las necesidades individuales de los clientes, potenciando la lealtad y mejorando la toma de decisiones financieras.

Estos beneficios se traducen en una mayor eficiencia operativa, reducción de costos y una experiencia bancaria más fluida y segura para el usuario final.

Finanzas 2.0

Las tecnologías que están adoptando las instituciones financieras en sus viajes de transformación digital son numerosas y variadas.

La blockchain, por ejemplo, es clave para garantizar transacciones seguras y transparentes, reduciendo intermediarios y facilitando pagos transfronterizos.

La analítica de datos permite analizar grandes volúmenes de información en tiempo real, optimizando la toma de decisiones y mejorando la personalización de servicios.

Internet de las cosas está comenzando a transformar áreas como los seguros, mediante el uso de dispositivos conectados que permiten ofrecer productos personalizados en función de datos en tiempo real.

Pero sin dudas una de las tendencias más fuertes del sector es la migración de las infraestructuras bancarias a la nube, que ha permitido una mayor agilidad operativa, con la posibilidad de escalar recursos según la demanda.

Los entornos cloud facilitan la colaboración entre diferentes áreas de una organización, mejoran la accesibilidad de los datos y permiten una mejor integración de nuevas tecnologías.

También reducen significativamente los costos asociados con el mantenimiento de infraestructura física y mejora la seguridad al implementar soluciones de ciberseguridad más robustas.

Estas tecnologías no solo están mejorando la eficiencia operativa de los bancos, sino que también están creando nuevas oportunidades de negocio y formas innovadoras de interactuar con los clientes.

BPI Financial Group: Un ejemplo de digitalización eficaz

El caso de BPI Financial Group Limited, una de las instituciones financieras más importantes de Singapur, simboliza el camino exitoso de una organización que dejó atrás sus sistemas obsoletos e incorporó una moderna plataforma tecnológica que le permitió conectar a sus clientes locales con los mercados globales.

Con el aumento de la velocidad y la complejidad de los negocios, BPI necesitaba obtener un conjunto de herramientas digitales integradas para automatizar, rastrear y optimizar sus operaciones contables y financieras.

Luego de analizar varias propuestas, optaron por la solución SAP Business One, que incluía todas las prestaciones que la empresa requería en ese momento. Y para llevar a cabo la implementación, recurrieron a Axxis Consulting, una compañía partner de SAP y miembro de United VARs, que los acompañó desde el inicio hasta la puesta a punto del proyecto.

“El equipo proactivo de Axxis identificó nuestras prioridades e implementó SAP Business One para satisfacer nuestras necesidades a un precio competitivo con un soporte rápido y constante”, explica Coco Chan, gerente de Finanzas de BPI Financial Group Limited.

El nuevo sistema le permitió a la compañía financiera de Singapur optimizar el trabajo de rastreo y gestión de documentos, y resolver el tema de la revalorización de la moneda extranjera en las transacciones internacionales.

En definitiva, con la digitalización de sus procesos comerciales, BPI mejoró su productividad, redujo costos y comenzó a ofrecer un servicio más rápido y eficiente a sus clientes.

El eje puesto en el cliente

La transformación digital del sector financiero es un proceso en constante evolución. Las tecnologías son solo el principio de un camino en el que la innovación será la norma y no la excepción.

Sin embargo, la verdadera medida del éxito de esta transformación no radica en la sofisticación de los algoritmos o en la velocidad de las transacciones, sino en la capacidad del sector para mantener y fortalecer la confianza de sus clientes.

En un futuro donde los datos son tan valiosos como el dinero mismo, la responsabilidad en su manejo será tan crucial como la solidez financiera.

El desafío ahora es navegar este nuevo paradigma sin perder de vista el objetivo fundamental: servir mejor a las personas y comunidades que confían en el sistema financiero.

atrás

separator to footer

stronger than one